Ficha de Alondra

Nombre: Alondra/ Lark
Nombres anteriores: Ninguno
Nombres siguientes: Ninguno
Lunas: 16
Clan: Ninguno
Rango: Proscrita
Género: Femenino

Descripción mental: Gata misteriosa, no muy habladora, pero muy activa. Siempre dispuesta a luchar. Seria y recta, también puede ser una gran amenaza. Nunca muestra señales de debilidad. Muy valiente, nunca se rinde ante un desafío. Realmente, nunca da muestras de tener sentimientos, ya que lo considera una debilidad, y nunca ríe o llora. Tanto es así que se ha convencido a si misma de no tener sentimientos. Nunca tiene piedad, ni miedo. Es muy estricta.

Descripción atlética: Gata ágil y rápida a la par que fuerte, suele utilizar la astucia para vences a sus enemigos. A veces ataca por la espalda o finge una rendición y sabe confundir al adversario. Buena cazadora, sabe trepar bien a los árboles, por lo que suele cazar ardillas o animales voladores. Tiene muy buena vista, y se suele guiar por ella más que por el resto de sentidos. No duda en atacar al enemigo si es necesario, pero sabe tener compasión de los que la merecen. Muchas veces pasa desapercibida por su pelaje oscuro, por lo que le es fácil sorprender a los enemigos.

Descripción física: Gata blanca con un ojo verde y otro azul. Tiene la cola y las patas muy largas y las orejas grandes. Sus ojos son también grandes y tiene uñas muy largas y afiladas. Su pelaje está muy bien acicalado. No es una gata muy grande, pero si muy delgada. Tiene unos dientes muy afilados, a pesar de no ser muy grandes. Su oreja derecha tiene una marca por culpa de un arañazo que se hizo con una planta espinosa cuando era pequeña.

Gustos:

- La noche
- La lluvia
- La nieve
- La soledad
- La luna llena

Disgustos:

- Los débiles
- Los mininos caseros
- Los tejones

Historia:

Alondra nació en el Clan de la Sombra junto a sus hermanos, que murieron de neumonía poco después. Su madre la crió hasta que se hizo aprendiza, y murió poco después a manos de un tejón. Lunas más tarde, su padre desapareció, y aún no se sabe dónde está. A ella le entrenó el lugarteniente del clan hasta que se hizo guerrera. Un guerrero del Clan del Río le hizo una cicatriz en el ojo izquierdo, pero no paró su entrenamiento por eso. Un día, sin saber muy bien porqué, dejó el Clan sin decirle nada a nadie, y no volvió al territorio de su antiguo Clan.